5 recomendaciones para conservar tus edredones nórdicos

 

1. Se recomienda ventilar la estancia donde se encuentre nuestro edredón, para liberar así la humedad que el edredón ha absorbido durante la noche, así conseguimos que el relleno se revitalice y no se apelmacen sus plumas y conserven todas sus propiedades aislantes.

 

2. No exponerlo nunca a una fuente de calor directa. Hay que tener cuidado con dejarlos cerca de radiadores, estufas, o incluso al sol durante tiempo prolongado, ya que el relleno de nuestro edredón perderá las propiedades básicas de aislamiento y flexibilidad.

 

3. Nunca dormir, sentarse o hacer actividades bruscas sobre el nórdico, ya que la pluma no se distribuiría correctamente a través de los tabiques interiores del tejido, provocando un rendimiento deficiente y una menor duración del Nórdico.

 

4. Cuando el nórdico se airea asiduamente, «respira». Además si es utilizado con funda nórdica no precisará lavados frecuentes. En este caso es recomendable lavarlo cada dos o tres años.

 

5. Cuando sea necesario lavarlo, Lería Decoración recomienda confiar su limpieza a un profesional. Si por el contrario decidiera lavarlo, deberá hacerlo con un detergente suave, sin agentes blanqueantes, sin lejía, y a una temperatura no superior a los 40º. Debe lavarse por separado sin mezclarlo con ninguna prenda y si utilizamos una secadora siempre en un ciclo de temperatura baja. No es aconsejable lavarlo en seco y que el tejido sufre mas y el relleno no se recupera de la misma forma.